ERLO (1.026 m.)

14:34


Distancia: 9,2 km (ida-vuelta)
Desnivel: 406 m.
Tipo: Ida y vuelta por el mismo camino.
Dificultad: Media.   
Accesibilidad: Accesible para joëlettes y barras direccionales.
A tener en cuenta: Habiendo hecho cumbre, en caso de alargar un poco más la ruta, se recomienda acercarse al refugio y cima de Xoxote. Para ello bajaremos al cruce después citado* y continuaremos la pista durante 1 km. Esta pista presenta una única dificultad que es la fuerte pendiente de unos 400 metros antes del refugio. En este encontraremos el aliciente del tan preciado pintxo.   

RECORRIDO
0,0: Saliendo de la zona recreativa de Aittola continuamos por el único sendero ubicado en la parte de arriba del parking. Avanzamos por este y aunque nos encontremos con dos bifurcaciones continuaremos por el camino más amplio (siempre hacia la derecha).  
1,7: Después de discurrir por un pinar nos encontraremos un nuevo cruce liderado por dos hayas. Ambos caminos llegan al mismo punto (en caso de ir en joëlette recomendamos el que tenemos fijado, es decir, el camino de la derecha ya que es más asequible por el terreno para la joëlette)
1,8: Nos encontramos con un tramo técnico de unos 200 metros en el que es importante mantener la atención e indicar correctamente cada paso.
2,2: Volvemos a reencontrarnos con el camino anterior y seguimos por el mismo.
2,7: Llegamos a una pista de piedrilla y ascendemos hasta llegar a un nuevo cruce. En este cruce existe la posibilidad de ir al refugio Xoxote que antes hemos especificado*. En nuestro caso continuaremos ascendiendo hasta casi la cima.
4,4: Una vez casi en la antena y habiendo bordeado la cima, escogemos una entrada poco pendiente para llegar a nuestro objetivo y zigzageamos siguiendo la senda y poniendo atención a la parte técnica del terreno. 

CULTURA
“Maikutz”. 
La charca de Maikutz guarda la leyenda de que sus aguas guardan un arca llena de monedas de oro. Su mismo nombre así lo parece indicar; Mari-kutxa (Arca de Mari, refiriéndose a Mari la diosa madre de la mitología vasca). La idea de la conjunción del nombre de la diosa (Mari) y el del arca (kutxa), tuvo que excitar sin duda la imaginación de las gentes en el paso de los siglos, y hacerles pensar en la existencia de un tesoro, idea esta tan extendida en distintos parajes de la montaña vasca. Pero la creencia de que existe un tesoro se le atribuye también al dolmen situado a escasos metros de la charca y que lleva el mismo nombre cosa que era normal ya que el dolmen era algo oculto donde se guardaba aquellas cosas que se pensaban que eran de valor. 


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